UNIDAD 13: Elohim en tiempos de Juicio, Advierte a Través de su Palabra que Está Dispuesto a Cortar Tanto a Justos Como a Pecadores

Elohim en tiempos de Juicio, Advierte a Través de su Palabra que Está Dispuesto a Cortar Tanto a Justos Como a Pecadores ¿por qué ocurrió esto?

Eze 21:3  Dirás a la tierra de Israel:  Así ha dicho Adonay:  He aquí que yo estoy contra ti,  y sacaré mi espada de su vaina,  y cortaré de ti al justo y al impío.

Cuando Elohim estaba juzgando y castigando a su pueblo de Judá/Yehudáh en el pasado, levantó a dos profetas para que les anunciara los juicios, sus causas, sus consecuencias, y lo que tenía que hacer el remanente fiel al que iba a dejar con vida. Esos profetas fueron Jeremías y Ezequiel, quienes escribieron dos libros que llevan sus nombres hebreos. A Ezequiel Elohim le dio una palabra que está escrita en Eze 21:3, en donde advirtió que estaba dispuesto a cortar o matar tanto a los justos como a los impíos. Esta advertencia pareciera crear confusión al que la lee, porque Elohim siempre procura guardar y proteger en tiempos de juicio, a los que son justos, tal como señalan los siguientes textos Sal 37:27-29, Pro 2:21-22, Isa 3:10-11 y muchos otros. Sin embargo, aquella advertencia era real y el profeta no podía callar, sino darla a conocer a aquel pueblo para que cada uno se preparara.

¿Cómo es posible que Elohim amenace también a los justos de querer destruirlos? 

Eso es fácil de entender. En aquel pueblo (Yehudáh) habían muchos hombres que eran malos y perversos, a ellos se refería Elohim cuando se refirió a los impíos en Eze 21:3. Sin embargo, entre aquel pueblo también habían muchos otros que se hacían llamar justos y santos, entre ellos estaba buena parte del sacerdocio, de los que adoraban y ministraban en el altar, así como aquel pueblo que escuchaba sus consejos y enseñanzas, y los tenían por ejemplo. Aquellos que decían ser justos, pero que realmente no lo eran, estaban muy errados, porque habían perdido el discernimiento entre lo bueno y lo malo Eze 22:26, y se habían hecho sabios en sus propios ojos. Realmente ellos para Elohim eran como impíos Isa 5:20-21, y justos en sus propios ojos, y a los ojos de un sacerdocio ignorante y corrupto, como los hijos de Elí en el pasado 1Sa 2:12.

Habían muchas cosas que Elohim las tenía prohibidas, y sin embargo, aquellos que eran justos a sus propios ojos las practicaban, y hasta pensaban que con hacerlas, a Elohim estaban agradando (como Saulo, cuando perseguía a los creyentes en Yahshúa). Habían también muchas cosas que Elohim las ordenaba en sus mandamientos, y sin embargo, aquellos que se creían así mismos como justos, las tenían en poco, y hasta las menospreciaban Eze 22:8. 

Hoy se Repite la Misma Historia, Hay Mucho Justo a su Propio Parecer

Es lamentable, pero hoy se repite esta misma historia. Estamos viviendo tiempos similares a los que vivieron Ezequiel y otros profetas, y por eso lo que ellos escribieron para aquel pueblo, Elohim lo ordena decir hoy a través de sus siervos y profetas ¡Ay del que se cree justo a sus propios!, ¡Ay del que es advertido de su injusticia y no se da por enterado! Isa 5:20-21. ¡Ay de aquellos que creyéndose justos, piensan que sobre ellos no caerá ningún mal! Amó 9:10. Porque la espada de Elohim está afilada para cortar a los impíos y a los pecadores de su pueblo en este tiempo Eze 21:3. Con frecuencia hoy uno ve sacerdotes, pastores y maestros, que le hacen creer a los miembros de su congregación, que todos son justos, por el simple hecho de asistir a sus templos, y por llevarles ofrendas y diezmos. Todos ellos son los fariseos de este mundo moderno Mat 23:13, Mat 23:15.

Esto que ocurrió en el pasado quedó escrito para nuestra enseñanza y reflexión, por favor no se crea justo en su propia opinión. Fundamente su justicia en la obediencia fiel a una enseñanza sana de las escrituras, y en una fe que tiene obras que se evidencia en la obediencia de aquello que se ha creído Stg 2:14-24. (El tema de la fe lo tocaremos en otro módulo). Además procure cada día estudiar las sagradas escrituras, pero no la lea como el que lee un libro o una revista, o como aquel que lee una historia, léala para buscar allí los mandamientos que usted debe guardar, para que Elohim le tenga como un justo verdadero en este tiempo, y no sea cortado con aquellos que se creen justos en sus propios ojos Eze 21:3.