En tiempos de visitación el pueblo necesita discernir entre los profetas que son de Elohim y los que no son
Mat 7:15 Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces.
Motivado a la importancia que tiene la palabra profética en los tiempos de cumplimiento y de visitación, el enemigo procura confundir al pueblo y destruir el propósito de Elohim; y por ello no solo usa a los pastores y ministros que con sus doctrinas de hombres, prohíben al pueblo escuchar la palabra profética, también usa a los mismos profetas que motivado a su falta de adecuada capacitación, y vida espiritual poco consagrada, el enemigo los cautiva y le son instrumento para dar palabra de error y confusión, muchos de los cuales, el mismo enemigo los respalda con señales y prodigios Mat 7:22-23, Mat 24:24, y el pueblo piensa que esas son señales que hace Elohim. A estos falsos profetas reconocerá solo aquel que sabe discernir entre frutos buenos y frutos malos, entre la justicia y la injusticia, y entre santo y lo profano Mat 7:15-20, esto es, el que es realmente maduro Heb 5:14, porque para el que no discierne, lo que es malo, le parece bueno, lo impuro le parece limpio, y lo profano santo Isa 5:20.
En esos falsos profetas Neh 6:10-14, profetizan (mejor dicho adivinan) y operan bajo la unción de espíritu de Jezabel/Izebel 1Re 22:6-8, 23, Apo 2:20, del espíritu/rúaj de Balaam/Bilam Apo 2:14, brujo e impío al que Elohim le permitió profetizar, y a quien puso palabra en su boca Núm 23:5, como testimonio de que aun hombres inicuos darían palabra en su nombre, pero eso no garantizaría que esos sean hombres santos, que iban a hablar palabras verdaderas de Elohim, para restauración y salvación del que las escucha 2Pe 2:1-3.
Este tema es de suma importancia y por eso lo profundizaremos en otro módulo donde se tratará el tema con exclusividad y mayor profundidad.
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