La Sabiduría y la Fe - Son más sabios los que tienen más fe
Para llegar a ser sabios primero hay que Creerle a Adonay
La mayoría de las personas se jactan de creer en la existencia del Elohim Verdadero, y de haber aceptado a su Hijo Yahshúa como su Salvador, y están cometiendo el mismo error de los judíos que se justificaban (se creían justos), y se jactaban porque eran linaje de Abraham Mat 3:8-9. Pero el hecho de creer en Elohim, y haber aceptado a su hijo, así como el de ser linaje de Abraham, no es suficiente para que Elohim nos considere hombres y mujeres de fe Stg 2:19 que le agradan Heb 11:6.
Nuestro problema radica en que creemos y aceptamos sólo aquellas cosas que nos conviene creer y aceptar, pero aquellas cosas que no entendemos, o que nos afectan de alguna manera (aún cuando las Sagradas Escrituras lo afirman), entonces las rechazamos, o buscamos argumentos y excusas, para no tomarlas en cuenta. Buscar argumentos y excusas no fundamentadas en las verdades eternas, es característico de las personas altivas que se creen sabios en su propia opinión. Aquí no estamos sugiriendo en que se crea en todo lo que se nos dice Prov 14:15, sino de creer en todas aquellas cosas que están fundamentadas en las Palabras de Adonay Luc 21:33. Creer lo que dice la Escritura es importante, porque si no creemos en las palabras de Adonay, es como si estuviésemos afirmando que Él es un mentiroso, y por eso no puedo creer en lo que leo de su palabra Núm 23:19.
La mayoría de las cosas que están escritas en su palabras son mandamientos y estatutos que nos enseñan como alcanzar la justicia Deu 6:25 y la santidad Lev 20:7-8. Sin embargo, el pueblo y los que le enseñan no las quieren creer y mucho menos enseñar (claro, no se puede enseñar lo que no se entiende). Por ejemplo, Adonay a través de las Escrituras nos enseña que el cerdo es un animal inmundo Deu 14:7-8, pero los pastores y maestros de este tiempo han inventado argumentos sin verdadero fundamento, para no enseñar y guardar estas verdades eternas que siempre guardaron nuestros ancestros que amaban y practicaban la santidad que demanda nuestro Padre Santo (abba kadósh).
La verdadera Fe está es en creer y guardar lo que dice Elohim en su palabra
Tiene verdadera fe aquel que lee, cree y guarda lo que dice las Sagradas Escrituras, pues la fe comienza por el oír o leer las escrituras, y creer para cumplir lo que ella dice Rom 10:17. Hay quienes aceptan como verdades algunas cosas que Adonay no acepta en su palabra como una verdad, y por eso se condenan así mismos en lo que han creído, pues todo lo que creemos y hacemos debe estar fundamentado en las Escrituras Rom 14:22-23.
Aclarando un poco el concepto de Fe
El concepto de fe que maneja hoy la iglesia es muy incompleto, porque está usando conceptos que están en los diccionarios de lenguas paganas y de confusión Heb 11:9. por eso es necesario investigar cuál es el concepto de fe que manejaban nuestros antepasados (el concepto de fe en la lengua santa) y el que manejaron los apóstoles (el concepto de fe en griego). Por esa razón, el apóstol Santiago aclara que aquel que cree, pero no obedece tiene una fe muerta, es decir, la fe que es sin obras es muerta, porque es una fe que no agrada al Eterno Stg 2:17-25. Pero de cuáles obras se refiere aquí el apóstol? se refiere a los mandamientos, o a las obras de la ley (del nuevo pacto), es decir a la obediencia de los preceptos que están escritos en la palabra (me refiero a todo lo que hoy llamamos Biblia).
Cuanto más aumenta nuestra Fe también aumenta nuestro conocimiento, entendimiento y sabiduría
El que tiene verdadera Fe cree la palabra y la obedece, entonces va a agradar a Elohim de quien espera galardón por su obediencia Heb 11:6. Elohim al que obedece más le enseña Sal 119:33, y le da más entendimiento Sal 119:34, para que cada vez que lea su palabra, la pueda entender mejor, y así aumente más su obediencia (esto es un círculo virtuoso), pues el que más conoce y más entiende, más puede obedecer para ser más justo Prov 4:18. Entonces de esa manera, no solamente la Fe irá en aumento, la sabiduría también irá en aumento, por esa razón, para ser sabios, se necesita una gran fe no muerta, sino obediente Stg 2:26.
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